La autoestima es uno de los aspectos más importantes para la buena salud mental de los adolescentes. También tiene una influencia directa en relación con el desarrollo psicosocial en esta etapa.
Un adolescente que tiene una alta autoestima tendrá más facilidad para establecer relaciones sanas tanto con amigos como con sus familiares y profesores. Mientras que un adolescente con baja autoestima es más vulnerable frente a problemas psicológicos que aparecen en la adolescencia.
¿Qué es la autoestima?
La autoestima es la valoración que una persona hace de su autoconcepto y el autoconcepto es la forma en que las personas se ven a si mismas.
Dicho de otra manera: El autoconcepto es la imagen que una persona tiene de si misma (soy bajo, delgado, sensible, tímido, etcétera), mientras que la autoestima es la valoración de dicha imagen (es malo ser bajo, delgado, sensible, tímido…)
Conclusión: La autoestima es un “auto-examen” que hacemos sobre nuestros valores, habilidades, características físicas y formas de comportarnos. Cuando reprobamos este “auto-examen” tenemos una baja autoestima, cuando aprobamos tenemos una alta autoestima.
¿Qué pasa con la autoestima durante la adolescencia?
En la infancia la autoestima se relaciona en gran medida con dinámicas al interior de la familia. Sin embargo, durante la adolescencia cobra mucha importancia el grupo de amigos y la sensación de pertenencia.
Un niño que no tiene buenas habilidades relacionales puede mostrarse feliz mientras está en casa. Sin embargo, este problema se agudiza bastante en la adolescencia.
Es común que vengan a mi consultorio padres preocupados. Muchas veces me cuentan que sus hijos eran tímidos siendo más pequeños pero eso nunca fue un problema. Sin embargo, ahora que son adolescentes, la timidez se ha convertido en tristeza, relaciones abusivas y falta de comunicación.
¿Entonces baja autoestima y timidez son lo mismo?
No son lo mismo pero es común que estén asociadas. Un adolescente que es tímido muchas veces tiene una baja autoestima, por esta razón prefiere no hablar, ya que siente que lo que tiene para decir es poco importante o que nadie lo va a escuchar.
¿Cómo es un adolescente con alta autoestima?
- Tiene facilidad para expresarse e interactuar con otros
- Es fácil para él pedir ayuda o hacer preguntas
- Le gusta experimentar cosas nuevas
- Busca la autonomía
- Asume posiciones de liderazgo e iniciativa
- Tiene relaciones interpersonales sanas (relaciones equilibradas)
- Es responsable con sus obligaciones
- Siente emoción frente a nuevos desafíos
- Se siente orgulloso inclusive de los pequeños logros
- Es tolerante a la frustración
- Tiene una buena relación con sus emociones
¿Cómo es un adolescente con baja autoestima?
- Le da pena pedir ayuda o hacer preguntas
- Se muestra tímido
- Prefiere que otros tomen el mando
- Hace cosas que van en contra de sus propias creencias para agradar a otros
- Dice que no se siente capaz de hacer ciertas cosas
- Prefiere que sus padres hablen por él o se hagan cargo de ciertas situaciones
- No tiene un grupo de amigos
- Dice que se siente solo y que nadie lo quiere
- Permite situaciones de maltrato
- Prefiere guardar silencio para no causar problemas
- Entabla relaciones de dependencia y codependencia
- Tiene problemas para regular sus emociones
¿Qué causa la baja autoestima en adolescentes?
La baja autoestima en adolescentes se relaciona con muchos factores diferentes.
Los factores más comunes que generan una baja autoestima en adolescentes son:
- Dinámicas de interacción disfuncionales al interior del hogar
- Cuidadores primarios que tienen estilos de autoridad dictatoriales, negligentes o indulgentes
- Características físicas vistas como “no atractivas” o “indeseables”
- Situaciones de acoso escolar o bullying
- Cuestionamientos relacionados con la identidad de género o la orientación sexual
- Diferencias étnicas, ideológicas o religiosas
- Comparaciones sociales
- Dificultades de rendimiento académico
Ten en cuenta que estas situaciones pueden causar una baja autoestima, pero también se pueden dar como causa de una baja autoestima. Es decir que pueden ser causa o consecuencia.
Consecuencias de una baja autoestima en la adolescencia
La baja autoestima puede tener consecuencias negativas en varias áreas, por ejemplo en el rendimiento académico, las relaciones interpersonales con pares y también las relaciones al interior de la familia.
Autoestima y rendimiento escolar
Un adolescente con baja autoestima, que tiene dificultades para conectar con otros o para buscar el apoyo de sus padres muchas veces tiene un rendimiento académico pobre.
Para él es complicado concentrarse en sus estudios ya que áreas de su vida vitales (como la socialización y la exploración de las primeras relaciones románticas) no funcionan de forma adecuada.
Autoestima y relaciones con pares
También las relaciones con amigos son difíciles para adolescentes con baja autoestima.
Esto es debido a que se ven a si mismos como insuficientes o incapaces. Y estas ideas los llevan a ser tímidos o demasiado robóticos en sus interacciones. SI un adolescente se comporta de esta manera, tendrá dificultades para tener amigos.
Autoestima y relaciones familiares
También es común que la comunicación con padres y cuidadores primarios disminuya como causa de una baja autoestima.
Esto sucede especialmente en casos de adolescentes que no quieren causar más dolor o preocupaciones a sus padres.
Una imagen negativa de si mismo, más dinámicas familiares complicadas pueden hacer que un adolescente piense que debe enfrentar sus desafíos en silencio.
Autoestima y amor
La exploración de las relaciones románticas generalmente empieza durante la adolescencia. La mayoría de adolescentes piensan con mucha frecuencia en este tema.
Un adolescente con baja autoestima también tendrá dificultades para relacionarse con las personas que le atraen. Esta dificultad se relaciona con su falta de espontaneidad al hablar con otros y también con la inseguridad que muestra con su forma de comunicarse.
¿Cómo fomentar una alta autoestima en adolescentes?
Primero es importante entender que alimenta la percepción negativa que tiene el adolescente de si mismo.
Si por ejemplo, la baja autoestima está relacionada con una falta de habilidades para relacionarse con otros, podría ser bueno darle recursos y herramientas al adolescente, que le permitan conectar con otros y hacer amigos.
Pero no siempre es así. Algunos adolescentes tienen una baja autoestima debido a dinámicas de interacción disfuncionales en casa. En este caso es importante aprender a llevar las discusiones de forma que el adolescente no quede en medio ni se sienta responsable de solucionarlas (o de causarlas).
Por otro lado, cuando el problema se relaciona con situaciones de discriminación por diferencias étnicas o ideológicas, es buena idea pedir el apoyo de directivas del colegio a la vez que se le enseña al adolescente a usar su diferencia como una fuente de fortaleza.